jueves, 8 de octubre de 2015

Bonito desamor.



Se escribe sobre el desamor en una tarde lluviosa de domingo
Sobre como el amor se va desvaneciendo como polvo entre la brisa. 
Sobre como los labios se unen y son besos que causan escalofríos,
y luego son sólo bocas juntándose.
Sobre cómo se apaga el brillo en los ojos que solía unir dos miradas. 
Sobre como la voz ya no es voz y es sólo silencio que perfora los tímpanos. 
Sobre como los "te quiero" ya no suenan igual,
se escribe sobre el desamor,
tanto se escribe... 
Sobre cómo te rasguña la piel, dejándote heridas,
que luego sigues abriendo, que sigues rasguñando.

Sobre como el tiempo se desintegra en una despedida
O sobre el tiempo infinito que nos lleva sanar.

Porque existen amores que se congelan en el invierno,

y en primavera ya no pudieron florecer. 


El lugar donde me perdí.




Me pasa muy poco, pero me pasa,
que de pronto los pies no me dan al suelo
mis manos tocan el tiempo y se desvanece entre mis dedos
pasa que, 
me pierdo,
un poco...
entre la gente,
entre recuerdos que no son nada
entre las fotografías que ya no encuentro.

Me pierdo,
entre los cigarrillos que no termine,
entre los besos que no pertenecieron a nadie,
entre los regalos que perdí,
entre las cartas que escondí
y ya no recuerdo donde las guarde.

Y me pierdo,
entre el espacio que queda,
y que no logro ver...
entre los lentes que nunca use, 
y que por eso,
 quizá estuve ciega.

Me pierdo entre las letras que no supe unir
para escribirte un bonito verso.

Me pierdo, 
entre los suspiros que se quedaron en mi garganta,
entre libretas perdidas llenas de sentimientos,
entre lágrimas que olvide llorar.

Me gusta perderme,
 de vez en cuando,
 y encontrarme entonces al final del verso, 
 encontrarme al finalizar la noche,
encontrarme entre la luz del sol.

lunes, 5 de octubre de 2015

Un viaje en tu piel.


Ven,
arrópate conmigo amor,
calentaremos las sábanas,
haremos un incendio debajo de ellas.

Déjame tus besos entre mis senos,
déjame tu éxtasis entre mis piernas,
corre por todo mi cuerpo,
no te canses,
haremos de esta cama,
un paraíso.

Quiero ser sólo de ti,
tus besos en mi cuello,
mis besos bajando por tu abdomen,
hasta llegar a tus rodillas...
mis labios no se cansaran del viaje tan placentero,
ida y vuelta,
mi lengua dará un largo paseo
por el lugar donde te enciendes,
y yo te apago.

Me beberé tu fuego,
serás sólo mio.